Unas de las más esperadas del año, sin duda, las vacaciones de verano.
En este periodo, esperamos “desconectar” y disfrutar de nuestro tiempo, aunque la verdad es que este término, probablemente el más utilizado en estas fechas, “desconectar”, no es en muchas ocasiones el que más se ajusta a la realidad.
No importa lo lejos que estés, las nuevas tecnologías ya se ocupan de que tus clientes puedan acceder a ti con un solo click. Internet, smartphones y tablets pueden servir de ocio en nuestras vacaciones pero también pueden trasladar el trabajo si no sabemos gestionarlo bien.
El año pasado ya os dejamos desde Opem algunos consejos para alejar de vuestras toallas las preocupaciones diarias del trabajo:
1. Si quieres desconectar empieza por el móvil. Dejarlo a un lado durante unos días nos permitirá disfrutar de los que nos rodean, aportar esa productividad tan deseada en nuestro trabajo también a nuestras vacaciones.
2. No dejes para Septiembre lo que puedas hacer hoy. Adelántate y deja cerrado todo aquello que pueda interponerse durante tus vacaciones.
3. D
elega, Delega y delega. Aunque te cueste creerlo, puede haber personas que hagan tu trabajo durante tus vacaciones, así que si tienes esa posibilidad aprovéchate de ello, confía en tu equipo y dales con antelación la información necesaria sobre aquello que irremediablemente dejarás a medias.
Y es que las vacaciones no se cogen por capricho, son establecidas por el código de trabajo con un mínimo de 30 días que se pueden distribuir a lo largo del año, que tienen disfrute de salario y que son obligatorias, quedando prohibida cualquier compensación con dinero. Las vacaciones son una necesidad para poder seguir con nuestro día a día, nutrir el cerebro, recargar pilas y volver a la rutina con más energía. El descanso es fundamental para rendir en cualquier puesto de trabajo, y así lo quisieron demostrar en un experimento realizado por el laboratorio de políticas públicas de Suecia, encontrando que es posible ser más eficiente haciendo menos, y que la productividad alcanza mayores niveles cuando las personas están más descansadas.
Porque desconectar en vacaciones no sólo nos permite descansar, también hace que seamos personas más felices, lo cual según un estudio realizado en México (“Felicidad y trabajo”), también afecta positivamente a la productividad. Fue la consultora Crecimiento Sustentable quien demostró que la gente feliz presentaba hasta un 33% más de energía y dinamismo, lo que generó hasta un 88% de mejora en la eficacia y la productividad. Además, mostró que el número de accidentes laborales podría crecer hasta un 300% en empresas donde la gente no era feliz.
En fin, parece que la clave de todo está en ser feliz, así que DESCONECTA, DISFRUTA Y DESCANSA. Que se note que estás de vacaciones.
Nosotros lo haremos y volveremos con nuestra mejor sonrisa para dar lo mejor de nosotros.
¡Nos vemos en Septiembre!
EQUIPO DE OPEM
