La pasada semana acudimos a las jornadas del Programa de Desarrollo de Habilidades dentro del marco de Desarrollo Directivo, las cuales se desarrollaron en la Universidad de Alicante. Estas actividades se basaron en el método “learning by doing” que permite aprender con la práctica, y nos sirvieron para adquirir herramientas muy necesarias en nuestro desarrollo profesional e incluso personal, tales como ser capaces de confiar en los demás, saber motivar a tu equipo, hacer presentaciones impactantes o conseguir la automotivación.
Emilio Ronco, experto en desarrollo de liderazgo, gestión de talento, desarrollo organizacional y executive coaching, nos dio las claves necesarias para trabajar eficazmente en equipos. Este tipo de trabajo se está consolidando en las organizaciones debido a que genera mejores resultados, sin embargo, no es tarea sencilla conseguir que un equipo de alto rendimiento funcione perfectamente.
Para ello se requieren diversos factores:
- Responsabilidad
- Holismo
- Liderazgo compartido
- Comunicación
En primer lugar, tener objetivos comunes de los cuales cada miembro se siente responsable de su cumplimiento. Otra de las características de un equipo es la diversidad, es decir, cada miembro debe poseer habilidades complementarias que aporten valor al grupo. Por otro lado, está el liderazgo compartido, ya que en un equipo no existe un líder formal si no que el equipo se autorregula mediante unas reglas previamente establecidas por el propio grupo. Y por último pero no por ello menos importante, la comunicación debe ser la máxima dentro del equipo, ya que favorece las relaciones y por tanto facilita la colaboración entre cada miembro.
La segunda ponencia vino de la mano de Faus Olmos, experto en formación en habilidades directivas, coaching ejecutivo, y en programas de desarrollo de recursos. Faus nos aportó herramientas para permitirnos descubrir que podemos superar nuestras barreras si somos capaces de salir de nuestra zona de confort, ya que la única limitación está en nosotros mismos, y si lo conseguimos podemos alcanzar objetivos que ni siquiera nos habíamos imaginado. En la última parte del taller trabajamos una cuestión ¿queremos ser los actores principales de la película de nuestra vida o vamos a adoptar un papel secundario?
En ocasiones, nos afectan demasiado las opiniones o posibles pensamientos de otros y nos hacen creer que nuestras inseguridades son limitaciones reales, y nada más lejos de la realidad. Tenemos que escribir nuestra propia historia, de la cual debemos ser los protagonistas.
Ignacio López de Zamora, especialista en marketing y comunicación empresarial, a través de ejercicios muy claros y prácticos nos ayudó a conocer y utilizar herramientas necesarias para realizar presentaciones memorables. En ocasiones tendemos a pensar que lo único importante de una exposición es el contenido. Pero existen otros muchos aspectos fundamentales, ejemplos de ello son:
- Redacción clara
- Texto corto y simple
- Pon imágenes y hazlo visual
- Cuidado con poner demasiados efectos
Pero por supuesto, lo más importante de una presentación eres tú. Debes conseguir que tu público se sienta cómodo. Tu estado anímico, tu forma de expresarse o tu empatía con él pueden conseguir que una presentación mediocre se convierta en una excelente.
La última de las ponencias del programa vino de la mano de Ángel Nájera Pérez, Senior Project Manager. Nos habló de la eficiencia en la dirección y gestión de proyectos. Este es un tema importante debido a que, según un estudio realizado por PwC las empresas que utilizan una metodología basada en la gestión de proyectos, pueden reducir sus costes hasta en un 20%. Por este motivo, una buena parte de la exposición se centró en la importancia de la planificación como factor de éxito del proyecto, ya que de ella depende el resultado final. A priori no podemos saber con certeza si un proyecto va a tener éxito, pero sí podemos conocer si va a fracasar, porque si un proyecto no cumple con determinadas condiciones, es seguro que no funcionará. Por ello, como no podemos influir en el éxito de un proyecto, influyamos en su posible fracaso, reduciéndolo al máximo con una buena planificación.
Para cerrar el programa, Israel Pastor y José Antonio Carrión como directores del curso señalaron la importancia de la formación en competencias directivas utilizando una metodología experiencial, con un método pedagógico contrastado que integre diferentes herramientas que aseguren la asimilación de contenidos y la aplicabilidad de los mismos, como el que venimos utilizando en nuestro máster MDDe, por último animaron a los alumnos a que el proceso de mejora y formación continua les acompañe durante toda su carrera profesional focalizando en el concepto de empleabilidad y marca personal como responsabilidad de cada uno como la mejor garantía de estar preparados para cualquier reto profesional.